Bombardeos sin tregua en el Este de Ucrania
Rusia siguió bombardeando el este de Ucrania ayer domingo y su presidente, Volodimir Zelenski, se apresta a intervenir hoy lunes ante las élites políticas y económicas mundiales reunidas en Davos, en una contraofensiva diplomática.
Tras fracasar en su intento de tomar el control de la capital ucraniana, Kiev, las tropas rusas concentran ahora sus esfuerzos en el este de Ucrania, donde los combates no dan tregua.
En ese contexto, el parlamento ucraniano aprobó prorrogar la ley marcial y la movilización general hasta el 23 de agosto.
Según la presidencia ucraniana, los bombardeos rusos alcanzaron la noche del sábado las ciudades de Mykolaiv, Járkov y Zaporiyia.
La víspera, siete civiles murieron y 10 resultaron heridos en la región de Donetsk, y en la región de Lugansk murió una persona y dos resultaron heridas, todos en bombardeos, según sus gobernadores.
“Los rusos están volcando todos sus esfuerzos para conquistar Severodonetsk”, dijo el gobernador de la región de Lugansk, Sergei Gaidai. Esta ciudad es estratégica para conquistar la región, que junto con Donetsk conforma el Donbás.
“La ciudad está siendo destruida, como antes destruyeron Rubizhne y Popasna”, denunció Gaidai el sábado.
El estado mayor ucraniano señaló ayer domingo en su informe diario que el ejército ruso continuaba sus ataques con misiles y medios aéreos en todo el territorio e, incluso, “aumentó la intensidad utilizando la fuerza aérea para destruir infraestructuras cruciales”.
Según el presidente Zelenski, la guerra “será sangrienta, habrá combates, pero terminará definitivamente por la vía diplomática”.
Hasta la fecha, se han llevado a cabo varios encuentros entre negociadores de ambos bandos, pero sin resultados concretos.
El presidente polaco Andrzej Duda, que visitó Kiev este domingo, aseguró que a partir de ahora será imposible “hacer negocios como de costumbre” con Rusia.
“Después de Bucha, Borodianka, Mariúpol, ya no puede haber más ‘business as usual’ [negocios como de costumbre] con Rusia”, declaró en un discurso ante el Parlamento ucraniano.
En Bucha y Borodianka, ocupadas y posteriormente abandonadas por el ejército ruso, se descubrieron centenares de civiles muertos tras el paso de las fuerzas de Moscú. Y en el sureste de Ucrania, la ciudad portuaria de Mariúpol quedó en ruinas tras meses de asedio y bombardeos incesantes que costaron la vida a al menos 20.000 civiles, según las autoridades ucranianas.
“¿Qué puedo esperar todavía? ¿Qué puedo decir cuando la casa está destruida, cuando la vida está destruida?”, se preguntaba Angela Kopytsa, de 52 años, en esta ciudad.
El mandatario polaco dijo también que no descansaría “hasta que Ucrania sea miembro de la Unión Europea”. El ministro delegado francés para Asuntos europeos, Clément Beaune, insistió que la adhesión de Kiev a la UE “tardará probablemente 15 o 20 años”.
AFP